La comodidad y satisfacción a la hora de tener un vehículo es grande, pero el vehículo no solo viene acompañado de eso, sino también de un fuerte gasto, el cual implica tener que asumirlos.

Los automóviles así como pueden ser utilizados para nuestro disfrute personal, muchas veces son nuestraherramienta de trabajo, y de ambas maneras hay que invertirles dinero.

Por suerte,  existen muchas maneras para reducir los gastos y de esta forma estar un poco más tranquilo a la hora de tener un coche.

Conduce con precaución

Puede parecer algo sencillo y simple el conducir con cuidado, pero esto llega al punto de evitarte y disminuir costos que a lo largo del tiempo pueden ser elevados.

Tener precaución a la hora de manejar puede reducir gastos desde el combustible, hasta los neumáticos. Al conducir con una velocidad moderada y evitar frenos imprevistos, ahorras un 30% de combustible y la vida de los neumáticos puede prolongarse.

De la misma manera que manejar con cuidado ayuda al ahorro de combustible y neumáticos, también puede reducir los problemas mecánicos. Una de las costumbres que tienen los conductores es dejar el embrague del pedal presionado en el semáforo con la caja en primera. Este hábito que hemos adquirido entre los chóferes, reduce la vida útil del embrague. Las recomendaciones para evitar este tipo de daño, es colocar la palanca de cambios en punto muerto y soltar la palanca de cambio al detenerse.

Elige sabiamente tu seguro adecuado

La mayoría de los errores que comete una gran parte de la sociedad, es la elección de un seguro al azar y terminan pagando un servicio a un costo muy elevado, sin saber las políticas e información acerca del mismo. Comparar precios y las distintas compañías qué hay en el mercado, es la mejor opción a la hora de tomar una decisión.

Con la tecnología que se cuenta en estos tiempos, existen comparadores online acerca de seguros, o simplemente puedes realizar distintas llamadas a diferentes aseguradoras antes de tomar una decisión . En algunos casos, hay compañías que ofrecen promociones especiales para nuevos clientes, las cuales puedes aprovechar.

Hay que tener en cuenta la relación dinero y seguro, sumándole la posición económica en la que nos encontremos. Así, podrás adquirir la cobertura que se adapte mejor a tus necesidades, revisando detalladamente la póliza de seguro que se te va a otorgar.

Antes de firmar el contrato por tu póliza, lée detalladamente y verifica que tipo de riesgos cubre la misma. De esta forma, te darás cuenta si algún parámetro es innecesario en tu requerimiento y podrás pedir que te lo eliminen, contando con una rebaja en el costo final.

Un ejemplo muy fácil de esto, puede ser el clima. Si trae consigo una protección de daños causados por el granizo,y vives en una ciudad donde este clima es poco común, puedes prescindir de ella.

Verifica tus neumáticos 

Cuando los neumáticos se encuentran a un nivel muy desgastado o por su defecto, desinflados, provocan el incremento de la fricción y generan un mayor consumo de combustible. Lo recomendable para reducir ese gasto “ extra” en combustible, generado por el deterioro de los neumáticos, es la verificación de la presión de aire, fijándose que la misma sea la correcta.

Si las bombas de aire tienen un costo adicional por el uso del servicio, lo recomendable es que adquieras tu propio compresor, y de este mismo modo vas destrozando gastos de tu vehículo.

Revisa los neumáticos para verificar que se encuentren en un buen estado. Rótalos periódicamente, prolongando de esta manera su duración. Coloca los que cuenten con mayor desgaste de rodadura en la parte delantera del vehículo. Hay empresas que cuentan con este servicio de manera gratuita.

Recurre al mecánico de manera frecuente

Muchos ven que recurrir al mecánico de manera frecuentepuede ser un gasto innecesario, siendo esto al revés.Dirigirse al servicio técnico de tu vehículo, puede reducirte y librarte de costos que pueden ser más grandes en un futuro.

Verificar el estado de tu motor y reemplazar piezas pequeñas, que mayormente se desgastan por el tiempo de uso, evita los daños graves que puede tener, y de esta misma manera, bajar el impacto del costo que ocasiona un motor.

Realiza un cambio de aceite y de filtro cada 15.000 kilómetros, así prolongas la vida de tu máquina.Reemplaza amortiguadores cada 60.000 kilómetros, sustituye el líquido de los frenos cada 80.000 kilómetros aproximadamente y las pastillas a los 100.000 kilómetros. También, cambiar el embriague y la correa de distribución cuando es necesario, es una manera más de cuidarte tanto a ti como el vehículo.

Estas son algunas de las recomendaciones que puedes tomar para no tener contratiempos ni sobre gastos cuando posees un automóvil, disminuyendo el costo de lo que significa tener un coche.