Siéntese debajo y trate de tener una impresión del árbol, tal como desarrolla un sentimiento por una persona cuando la enfrenta por primera vez. Cierra los ojos, centra tu atención en el árbol y acéptalo con tus pensamientos. Entonces escúchate a ti mismo.

Lo más probable es que obtenga una respuesta la primera vez

Si tiene éxito, acaba de hacer contacto con su primer ser natural: el espíritu del árbol. Y si no es así, no es nada trágico, tal vez solo esperaba una respuesta diferente a la que le dio el árbol. Muchas brujas también ven la sensación de la corteza en la piel como una respuesta del árbol.

En especial el Vudú Candomblé de 7 nudos tiene mucho que ver con la naturaleza y su energía.

Encuentra tu ángel de la guarda personal

Tan único como es cada persona, el contacto con su ángel de la guarda será igualmente único. Por lo tanto, no puede haber reglas de aplicación general sobre cómo encontrar a su ángel. Sin embargo, es muy importante: aprende a escuchar tus sentimientos, lo que te dice tu voz interior, porque es la conexión con los ángeles.

Tu ángel de la guarda es un ángel que solo está ahí para ti aunque no te des cuenta

Pero te dará señales que te permitirán reconocerlo. Por supuesto, puede darle un nombre a su ángel de la guarda si lo desea. Puede ser cualquier nombre que desee. Sin embargo, no debe nombrarlo con un nombre que ya haya usado otro ángel, por ejemplo, uno de los arcángeles.

Los diferentes seres celestiales trabajan juntos y se apoyan entre sí con su fuerza, pero ningún otro ángel puede hacerse cargo de la tarea de tu ángel de la guarda. Su ángel de la guarda es y sigue siendo el principal responsable de su bienestar personal.

Tómate un tiempo para tu ángel de la guarda

Elija a su compañero celestial de nuevo todos los días, tal como elige todos los días para aprovechar al máximo todo lo que encuentre. Es importante que haga un esfuerzo absolutamente serio para ponerse en contacto con su ángel de la guarda.

En primer lugar, debe considerar con calma por qué desea comunicarse con él en primer lugar y qué espera de él. Solo cuando estés realmente abierto a un encuentro con tu ángel deberías decidir dar este paso. Debe tener claro que, gracias a quienes, ángeles, algunas cosas pueden cambiar pronto en su vida.

No pierda la fe de inmediato si las cosas no salen como lo imaginaba: todo está bien, para su mejor. Tu ángel de la guarda ya se ha ganado un poco de confianza. Si no entiende adónde lo lleva, pregúntele. Hay una serie de rituales y meditaciones que lo hacen posible.